Hablamos de marketing de interrupción como traducción del término en inglés outbound marketing, aunque la mayoría de las veces es fácil utilizarlo como sinónimo de publicidad. Se le llama así porque interrumpe la actividad del usuario, por ejemplo mientras está navegando para mostrarle un banner, una llamada de telemarketing o un spot si hablamos de televisión.
La actitud del usuario hacia esta interrupción no es nada buena la mayoría de las veces porque se ve privado de aquello que estaba viendo a cambio de algo que no estaba buscando. Muchos consideran este tipo de marketing una molestia y por ello buscan fórmulas para huir de él, por ejemplo con bloqueadores de publicidad.
Ocurre todo lo contrario con el marketing de atracción. En este caso, se utiliza como traducción de inbound marketing porque establece una relación con el usuario de manera totalmente opuesta: no le molesta, si no que le ofrece algo que le resulta interesante y atractivo. Le atrae en lugar de interrumpir aquello que está haciendo.
El marketing de atracción se basa en estrategias como social media marketing, SEO y content marketing, es decir, no en campañas que interrumpen al usuario si no que se mezclan de buenas maneras con los contenidos que está consultado. De hecho, suele ser el propio usuario quien lo encuentra y no por una acción publicitaria si no porque lo está buscando. Por eso tiene una actitud más positiva que con el outbound marketing.
Las diferencias entre marketing de interrupción y de atracción tienen que ver también con la inversión necesaria. El outbound suele requerir mayor presupuesto al depender de plataformas ajenas como AdWords, portales o publicidad en redes sociales. Mientras que, por su parte, el inbound también requiere de ciertos recursos para abrir un blog o crear contenidos, pero menores al depender únicamente de los esfuerzos de la propia empresa.
Cada empresa necesita una estrategia diferente, pero, por lo general, el marketing de atracción suele dar mejores resultados: si has de elegir, mejor el inbound marketing.